La Reflexología Podal es un masaje terapéutico en la que se presionan puntos concretos de los pies, basándose en que todos los órganos tienen su zona refleja en nuestros pies.
Esta terapia pertenece en la actualidad a uno de los métodos más usados en la medicina Natural para ayudar a recuperar la salud. Se emplea para tratar ansiedad, dolores de espalda, dolor de cabeza, tratar problemas digestivos, drenar el sistema linfático. Es un método muy eficaz para aliviar dolor y su uso en fibromialgía, fatiga crónica y enfermedades crónicas es cada vez más en auge.
La Reflexología Podal tiene sus orígenes en la antigua medicina china pero fue olvidada durante mucho tiempo hasta que en el siglo XIX. Iwan P. Paulow, premio Nobel en 1904 explicó los reflejos y con sus famosos experimentos desarrolló las bases científicas de la Reflexología Podal.
En 1913 Dr. William Fitzgerald desarrolló la teoría de que el cuerpo está recorrido longitudinalmente por diez líneas energéticas cuyo recorrido va desde la punta de los dedos del pie hasta la cabeza, a su vez estas líneas son divididas en tres tramo transversales, permitiéndonos establecer la posición de las partes del cuerpo y los órganos en los pies.
Y fue en 1938 cuando Eunice Ingham, una masajista americana, presentó un nuevo sistema de diagnóstico y terapia de Reflexología Podal en el que diseña un mapa completo de todas las partes del cuerpo y sus órganos reflejos en los pies.
